viernes, abril 07, 2006

Cuestión de secundarios.

Resulta que nos pasamos toda la previa al cruce de cuartos de la Euroliga hablando de Navarro, Bullock o Rakocevic, y tras dos partidos solo podemos hablar de Hervelle, Williams o Hamilton.

El partido de ayer sólo me sorprendió por el ejecutor. Si alguien me hubiese pedido que predijese el desarrollo del encuentro antes de comenzar, les aseguro que me hubiesen tomado por futurólogo.

Partido más o menos igualado, pero con el Barça siempre por delante y dando mejores sensaciones, hasta que cuando todo parece perdido, llega el talento irracional del Madrid de Boza y lo desmonta todo.

Y es que este Madrid no puede ofrecernos otra cosa más que inspiración puntual. Nunca había visto un equipo de baloncesto sin un base, y eso es un lastre que solo el tremendo talento de la plantilla blanca puede compensar.

Para el tercer partido, vuelvo a apostar por mi equipo, y si me piden que les escriba el guión, seré aún más dramático. Partido casi sentenciado por el Barça, eliminatoria medio resuelta, y a la deseperada, se hizo la luz. Me da igual si de la mano de Hervelle, Bullock, o incluso el inclasificable Fisher, pero de verdad que apuesto por mi equipo.

PD: ¿No les parece que Ivanovic presiona tanto a sus jugadores que por eso fallan en los momentos clave?. Y si no acuérdense del pobre Splitter en la última final ACB.

2 comentarios:

kantinu dijo...

Evidentemente, la influencia de Ivanovic es tremenda para los jugadores, que tardan muchos meses en asimilar la presión del mister, y en algunos casos no llegan a soportarla jamás (Tomasevic es el mejor ejemplo).
El caso de Splitter lo veo diferente. Creo que tanto él como Sergi Vidal le deben parte de su salario y toda su proyección a este empecinado entrenador serbio.
Ivanovic no construye equipos, fabrica rodillos. Y eso lleva su tiempo, y precisa de mentes tan fuertes (o más) como sus cuerpos. Porque otra gran característica del juego de Ivanovic es contar con el máximo despliegue físico (el músculo que tenía el Vitoria le valía, el del este Barça todavía no).

En fin, que el próximo jueves puede pasar de todo, aunque lo más probable es que el Barça vaya mandando todo el partido con diferencias en ningún caso superiores a los 10-12 puntos. Y a esperar a ver la magnitud del arreón final de los bajitos del Mardrid.
Venga, me mojo. Si la última decisiva posesión es para el Madrid, con dos abajo...entra el triple.

Para mi se podrían ahorrar el partido del domingo.

Un abrazo.

Fer dijo...

Tienes razón al indicar que Ivanovic construye grandes jugadores, pero eso no quita, para que en momentos puntuales cuando la presión es máxima, tengan tanto miedo a fallar ante Dusko, que acaben fallando.

Un saludo.